¿Qué motiva al Mundo viajar a Italia?

Un porcentaje considerable de turistas americanos, asiáticos, externos al continente europeo, suelen contratar programas de larga duración para recorrerlo de manera comprimida y general. Casi en la totalidad de ellos, Italia se incluye dentro de los circuitos llamados “Panorama Europeo” España, Francia, Alemania, Austria, Holanda, Bélgica, Suiza e Italia, conforman parte de ese abanico clásico, obviamente se trata de un simple vistazo, no mucho más pero suficiente como para tener una aproximación, bastante limitada, de las bondades del viejo continente. Ahora bien, aquel que tenga la oportunidad de participar en uno de esos periplos y cuando sea el turno de poner pie en Italia, notará que ese país merece mucho más que unos pocos días de estadía. Roma, Venezia, Florencia podrían considerarse el ABC peninsular, sin embargo, las tres ciudades, representan tan solo una extraordinaria muestra de todo lo que Italia puede ofrecer al visitante. Sus riquezas arquitectónicas, los paisajes, sus pueblos, la gastronomía, los museos, resultan inagotables, su patrimonio cultural y geográfico son incomparables.

Por otro lado, las distintas corrientes migratorias esparcidas por el Orbe, especialmente las que se radicaron en Argentina, Uruguay, Brasil, Australia, Estados Unidos de Norteamérica, contribuyeron a la difusión de la “Madre Patria” de mil maneras. Sea por su lengua, sus grandes obras literarias, el encanto de su música, la producción de vinos y trabajos relacionados con el campo, la necesidad de mantener vivas sus tradiciones, esas comidas tan sabrosas, el sublime valor por la unidad familia, la construcción y arquitectura, los diseños y esa tenacidad por salir adelante a fuerza de sacrificio y trabajo, han sido los artífices del respeto y la admiración global.

Además Italia es reconocida en el Mundo entero por su altísima calidad artística, cuna del renacimiento, del Imperio Romano, generadora de enormes e ilustres personajes de la humanidad como Julio Cesar, Marco Polo, Dante Alighieri, Leonardo da Vinci, Miguel Angel Buonarotti, Galilieo Galilei, Antonio Vivaldi, Giuseppe Verdi, por nombras algunos, creadora permanente del “desing italiano”, innovadora, pujante, pasional, Italia expande sus bondades por los cuatro puntos cardinales.

Otros fuertes llamadores son la música y el cine, la calidad de sus artistas, directores, compositores, músicos y cantantes han deleitado a generaciones enteras. Desde el neorrealismo hasta nuestros días, las películas han fortalecido la identificación con el público, ni que decir de sus escenografías naturales, reales. ¿Cómo no recordar la escena de Marcello Mastroianni y Anita Ekberg dentro de la Fontana di Trevi en la Dolce Vita de Federico Fellini? O aquel pequeño pueblo imaginario de Sicilia para la película “Cinema Paradiso. Imposible olvidar a las grandes divas, hermosísimas mujeres como Sophia Loren, Gina Lollobrigida, Anna Magnani, Mónica Vitti, Claudia Cardinale, Ornella Muti o Mónica Bellucci.

Cada uno tendrá sus razones, lo cierto es que Italia es un país para quedarse, para recorrerlo de punta a punta y quien ya haya estado, siempre encontrará algo nuevo por descubrir puesto que pese a ser un pequeño país, la cantidad de pequeños pueblos, iglesias, valles, montañas, lagos y costas, serán imposibles de conocer al menos, en una sola vida.